Un gran duelo interpretativo entre Richard Burton y Elizabeth Taylor, por aquel entonces casados, bien secundado por la otra pareja protagonista del film, George Segal y Sandy Dennis. Célebre por contener una de las mejores interpretaciones, si no la mejor, de Taylor y por una puesta en escena brillante que, sin deshacerse de su origen teatral, logra tener entidad propia como largometraje.
SilviaMorenoDiazSEOCommunity manager2.0, cineclasicosilviamorenodiaz,
No hay comentarios:
Publicar un comentario